La Agrupación Ultzama (AU) ha acusado hoy a EH Bildu de llevar al Ayuntamiento a una situación crítica en términos económicos y de no ofrecer información a los concejales.
En este sentido la AU indica en un comunicado que a la sentencia del TSJN, que condena al Ayuntamiento de Ultzama a devolver la subvención por la planta de biogas y a pagar los intereses y costas por el cierre de la misma, ahora se suma la solicitud de un aplazamiento de deuda de 260.000 euros.
Para AU el pleno es el órgano competente para tomar esa decisión pero sin embargo EH Bildu la llevó a cabo sin informar pese a que la misma costará en intereses al Consistorio 31.390 euros.
Esto hizo, agrega, que la alcaldesa, Arantxa Martínez, optara por acudir a concertar un crédito privado que de nuevo debía ser aprobado por mayoría absoluta del pleno, por lo que en el celebrado el pasado día 20 introdujo un punto en el orden del día para ratificar las resoluciones de alcaldía y así «blanquear todas sus decisiones».
Sin embargo, asegura la AU, el gobierno local «no ha llevado en ningún momento al pleno, el órgano competente» ni la solicitud del aplazamiento de deuda presentada al Ejecutivo foral ni tampoco el pago de dos mensualidades en noviembre y diciembre.
Agrega al respecto que «desde el 2 de mayo existe una deuda» que el Ayuntamiento «no ha contabilizado ni reconocido» y de ahí que el pasado jueves tuviera que presentar una moción de urgencia in voce para modificar los presupuestos, una iniciativa que «llega con siete meses de retraso e incumpliendo la legalidad».
Para la AU esta forma de proceder de EH Bildu «supone una irregularidad patente y una absoluta falta de respeto, ya que se llevó fuera del día y por urgencia», por lo que tacha de «incomprensible» que no se hubiera actuado «cuando desde mayo se sabe que se debe pagar una cantidad por una sentencia».
Además apunta que «la alcaldesa lleva negociando la financiación de la deuda desde el 7 de septiembre», por lo que «tampoco se puede entender la urgencia de la moción si no es porque los acontecimientos no le han dejado otra alternativa».
Con estos datos, la Agrupación Ultzama sostiene que el procedimiento seguido «es contrario a derecho» ya que la Ley Foral de Haciendas Locales «impide aprobar un gasto sin partida».
Y en este sentido asegura que la modificación presupuestaria aprobada por el pleno el día 20 «no será firme hasta que se resuelvan las alegaciones» y por lo tanto «se ha adoptado un acuerdo de gasto, una contratación de crédito y realizado dos pagos sin partida firme para soportarlo».
Por todo ello advierte de que «la situación económica en la que EH Bildu ha dejado al Ayuntamiento de Ultzama es muy grave y todavía quedan por resolver otros pleitos por los que se podría incurrir en obligaciones de pago de hasta 4 millones de euros», lo que sería «la ruina» del Consistorio.
A todo ello la AU suma que por incumplir la regla de gasto el Ayuntamiento deberá presentar un plan económico ante el Gobierno de Navarra y el Ministerio de Hacienda, lo que «supone una intervención de facto de las cuentas de la entidad, muy saneadas hasta la entrada de la coalición abertzale en el Ayuntamiento».
Así, concluye, «el Valle de Ultzama se ha quedado sin planta de gestión de residuos, sin solución para los purines de los ganaderos, sin dinero, intervenida y con la amenaza de una deuda de cuatro millones de euros en solo tres años y medio de gestión de EH Bildu» pese las «continuas advertencias» sobre las consecuencias de las decisiones que pueden llegar a la «responsabilidad personal y patrimonial». EFE
