El presidente del Gobierno de este país, Pedro Sánchez, tras el «baño» sufrido ayer en el Congreso, a cargo de los lideres del PP y de Ciudadanos, respectivamente, debería reflexionar, debería darse cuenta de que con la situación actual, no se va a ninguna parte.
Un Gobierno sostenido por quienes quieren sí, romper España, no debería durar un minuto más. El Gobierno de este país debería romper de una vez por todas con los independentistas y debería tomar el control del gobierno de Cataluña.
El presidente catalán sigue en sus trece y su gobierno también. No parece que haya vuelta atrás. Cuanta más fuerza tengan los CDR, los llamados comités para la defensa de la república, peor solución habrá.
Pedro Sánchez debe reaccionar ya, con contundencia, no con palabras. Las palabras sobran ya.
¿Por qué no un gobierno de concentración nacional, en el que entren todos los partidos constitucionalistas, que permitan un gobierno fuerte, sin la tutela de los nacionalistas? Un gobierno fuerte que tome las decisiones correctas, acabar con el independentismo.Que tutele a la autonomía catalana hasta que se vuelva a la normalidad, pasen, semanas, meses o el tiempo que sea necesario.
Cada hora, minuto o segundo que pasa, hace más difícil una solución