Dos Villavesas o transporte urbano en Pamplona. Archivo.
NAVARRAINFORMACIÓN.ES
El Transporte Urbano Comarcal de Pamplona niega «totalmente que se abandone a los chóferes ante las agresiones» y «se siguió el protocolo establecido ante estos hechos, acompañó al conductor en el centro médico durante todo el momento y le llevó a su vivienda».
TCC, concesionaria del Transporte Urbano Comarcal de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, ante las acusaciones vertidas por el comité de empresa ante una nueva agresión verbal a un conductor, señala que «los hechos que indican desde el comité de empresa no se ajustan en absoluto con la realidad».
«Condena cualquier tipo de agresión que puedan sufrir sus conductores y conductoras, recordando que durante todo 2018 no se ha producido ninguna agresión física a sus conductores y conductoras», añade.
Sobre el episodio al que se ha referido el comité de empresa, TCC asegura que «se siguió el protocolo establecido para este tipo de sucesos, avisando a la Policía Municipal de Pamplona y Policía Nacional de lo sucedido, siendo estos últimos quienes se personaron en al autobús».
«El conductor fue relevado del servicio para que pudiese acudir al centro médico, lugar en el que en todo momento estuvo acompañado por el responsable de Servicio de TCC y quien le llevó hasta su vivienda una vez realizadas todas las pruebas médicas pertinentes», puntualiza.
En cuanto a la acusación vertida sobre que TCC trató que la baja laboral se convirtiese en «contingencia común», la empresa subraya que «la decisión pertenece en su totalidad a la mutua, y en ningún momento TCC interviene en esa toma de decisión».
Conductores de villavesas protestan por agresiones y piden medidas de seguridad en Pamplona
