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El vicesecretario de Organización del PP, Javier Maroto, ha asegurado hoy que el partido «no comparte» la decisión de la presidenta del Congreso, Ana Pastor, de retirar del diario de sesiones el término «golpista», en referencia a los independentistas secesionistas catalanes
En declaraciones en los pasillos del Congreso, Maroto ha añadido que el PP va a llamar golpistas a «los golpistas independentistas de Cataluña porque lo son» y el uso de cualquier otra terminología «parecería un cambio de posición» que el partido no ha realizado. No obstante, Maroto ha indicado que respetan la decisión de la presidenta del Congreso, pero que «no la comparten».
Por su parte el portavoz de Ciudadanos, Juan Carlos Girauta, se ha manifestado en la misma línea. «Hay que retirar la palabra fascista, pero golpista es una descripción de quien ha dado un golpe de Estado», ha considerado Girauta, que justifica su uso en el caso de los líderes del referéndum ilegal de 1-O. Además ha reprochado el «silencio» del Gobierno socialista.
El problema ha venido tras la intervención de Gabriel Rufián de ERC que ha montado un espectáculo arremetiendo e insultando al ministro Borrell, interrumpiendo y perdiendo la compostura. Hecho que ha llevado a la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, tras tres avisos, a expulsarle. Momento en el que, según ha denunciado el ministro, un diputado de ERC le ha escupido al pasar a su lado.
Posteriormente, sin dejar concluir al ministro su intervención, Pastor ha tomado la palabra y ha decidido retirar la palabra «golpista» del diario de sesiones. Algo que ha molestado y enfadado tanto a Ciudadanos como al propio PP.
Y es que la tercera autoridad del Estado tiene la potestad única para eliminar todas aquellas expresiones que considere ofensivas y que hayan sido pronunciadas por sus señorías durante la sesión plenaria.
