Control de la Guardia Civil en Palencia. GUARDIA CIVIL. Archivo
Independientes de la Guardia Civil (IGC) ha pedido información y responsabilidad en torno al traspaso de las competencias de tráfico y seguridad vial a Navarra porque en su opinión el asunto ha sido abordado de «forma fría» a pesar de la implicación que tiene para muchas personas
«Es nuestro deseo el conocer todos los datos sobre la forma en la que afectará a nuestros compañeros de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Navarra la decisión o resto de negociación de la transferencia de competencia en materia de tráfico y Seguridad Vial en Navarra, por lo que pedimos conocer los plazos, afecciones, plantilla, soluciones, etc», dice IGC en un comunicado.
Añade que además exigen «la mayor de las responsabilidades en el trato del asunto, ya que estas decisiones afectan al normal desarrollo de la vida familiar de nuestros compañeros, más aún cuando ya hemos pasado por esta situación anteriormente en las Comunidades Autónomas de País Vasco y Cataluña, territorios donde la chispa independentista nos deja ver el resultado en el tiempo del traspaso de competencias».
Un asunto en el que la IGC sostiene que «una vez ‘fulminados’ por la transmisión del Estado a la Autonomía, el fin de los guardias civiles ha pasado de ser uno más en la integración del día a día, a ser acosados en sus acuartelamientos, lugares de ocio, trabajos de sus mujeres y marcados sus hijos, sufriendo un clima en ocasiones insoportable».
«No queremos que eso vuelva a pasar más en ninguna parte de España, de ahí nuestra inquietud ante el escenario próximo que se avecina», dice, y recuerda la contestación de los sindicatos a la ley foral de policías de Navarra, un «antecedente que nos hace estar a la defensiva».
U subraya que un navarro, el Duque de Ahumada, fundo en 1844 la Guardia Civil y una Navarra, Uxue Barkos, ha dado el 30 de octubre de 2018 «el primer paso para echar» a este cuerpo de la Comunidad Foral en lo que «no deja de ser una estrategia ideológica».
