Javier Esparza, presidente de UPN y portavoz en el Parlamento de Navarra.
NAVARRAINFORMACIÓN.ES
La liquidación de Davalor Salud, decretada por el Juzgado de lo Mercantil número 1, confirma, en opinión de UPN, “que el vicepresidente del Gobierno de Uxue Barkos, Manu Ayerdi, ha dilapidado tres millones de euros de dinero público, ha arrastrado a decenas de inversores particulares a depositar sus ahorros en este proyecto en lo que se inició como una apuesta suya personal y ha dañado la reputación de Sodena”
Para los regionalistas, “la liquidación de Davalor supone de facto su defunción y la pérdida absoluta del control por quien hasta ahora ha sido su administrador único, además de la imposibilidad de cobro ni de los 17 millones de euros que depositaron los inversores ni de los tres millones que prestó el Gobierno de Navarra a través de Sodena”.
“No es una simple operación fallida cono quiere hacer ver el cuatripartito y de manera especial, Geroa Bai, sino una irregularidad realizada a sabiendas y en contra del criterio de los informes técnicos que existían cuando llegó Ayerdi”, han añadido. “Con esa decisión, el vicepresidente menospreció la labor del cuerpo técnico de Sodena y, a la postre, ha desprestigiado el nombre y la trayectoria de esta empresa pública por apoyar por un proyecto por el que nunca habría apostado de no mediar la imposición del Consejero”.
“El tiempo y la investigación determinarán si estamos ante una irregularidad negligente o ante un acto de corrupción, pero, por el momento, la sucesión de enredos y manejos que llevó a cabo el Gobierno de Barkos para imponerse al criterio contrario de Sodena ni tiene precedentes ni a día de hoy dispone una explicación creíble y solvente”, han afirmado.
“UPN exige y continuará exigiendo por todos sus medios a su alcance, luz y taquígrafos sobre todas estas tortuosas decisiones que han llevado hasta aquí al Gobierno de Navarra”, han concluido.
