El pleno del Parlamento de Navarra ha aprobado una propuesta de resolución de UPN que conmina al Ejecutivo Foral a colaborar con el Gobierno central para la “ejecución de todas las inversiones consignadas en los Presupuestos Generales del Estado de 2018 en relación con Navarra, como la AP-15, la N-121 y el TAV”
Asimismo se insta a colaborar para la “realización de las inversiones financieramente sostenibles aprobadas por el Parlamento de Navarra”.
La propuesta, que ha salido adelante gracias a los votos a favor de UPN, PPN y Geroa Bai, la abstención de PSN y el rechazo de EH Bildu y Podemos-Orain Bai, era uno de los cinco textos presentados por los regionalistas durante el debate sobre el estado de la Comunidad Foral.
En primer lugar, habían mostrado su “compromiso con la Constitución, la Lorafna y los símbolos propios de la Comunidad foral” solicitando la eliminación de la Disposición Transitoria Cuarta y denunciando “la intromisión que supone la inclusión de Navarra en el Estatuto de la CAV”. Una propuesta que ha decaído al obtener únicamente el apoyo de UPN y PPN, la abstención de PSN y el rechazo del resto de grupos. Idéntico resultado ha logrado una segunda propuesta que reclamaba una “bajada de impuestos a las familias”, así como la habilitación del “procedimiento necesario para la devolución del IRPF de las prestaciones públicas por maternidad indebidamente devengado y no prescrito”.
En el ámbito educativo, se emplazaba al Gobierno de Navarra a “implantar nuevos estudios universitarios en el Campus de Tudela, a incrementar las plazas de FP en los grados Medios y Superiores más demandados y a cubrir las necesidades de la escuela pública en castellano con la implantación del PAI”. Esta propuesta tampoco ha salido adelante al ser apoyada solamente por UPN y PPN y contar con la abstención de PSN y el rechazo de los grupos que conforman el cuatripartito. En este epígrafe, se rechazaba la política educativa del actual Ejecutivo Foral por “sectaria y alejada de las necesidades reales” y se reclamaba “igualdad de oportunidades, libertad de elección para las familias y la no utilización del euskera como instrumento de construcción nacional”.
Sí ha prosperado una propuesta que emplaza al Gobierno de Navarra a “elaborar un nuevo Plan de Empleo en colaboración con los sindicatos y la CEN”. Este punto ha obtenido el apoyo de UPN y PPN, la abstención de Geroa Bai, PSN e IE y el rechazo de EH Bildu y Podemos-Orain Bai.
El regionalista Carlos García Adanero ha defendido que la Disposición Transitoria Cuarta “no debe estar ahí” y ha advertido que algunas formaciones, como la de la propia presidenta, “tienen como objetivo político” la desaparición de Navarra como comunidad diferenciada dentro de España.
El popular Javier García ha compartido “plenamente” lo expuesto por UPN, mientras que el parlamentario de Geroa Bai Unai Hualde se ha mostrado en contra de la mayoría de los textos. Según ha argumentado, su formación no apoyará actuaciones “que limiten la capacidad de decidir de navarras y navarros”, como es la supresión de la disposición transitoria cuarta.
En nombre de EH Bildu, Maiorga Ramírez ha considerado que las propuestas regionalistas reflejan “lejanía absoluta con lo que la ciudadanía piensa, siente y quiere” y que UPN se ha “alejado de ser un partido de Gobierno”. Laura Pérez, de Podemos-Orain Bai, ha considerado que el Parlamento “no puede mostrar su compromiso con la Constitución porque hay fuerzas mayoritarias que quieren cuestionar el actual marco constitucional”.
La socialista Ainhoa Unzu ha anunciado la abstención de PSN en todas las propuestas regionalistas y el portavoz de IE, José Miguel Nuin, se ha posicionado en contra de la mayoría, tras remarcar que “la Constitución está muy agotada”. EFE
