La riqueza financiera neta de las familias y empresas españolas, medida por la diferencia entre los ahorros que acumulan y las deudas que tienen, se situó en 1,410 billones de euros a finales junio, el un 2,3 % más que hace un año.
Según las Cuentas Financieras de la Economía Española correspondientes al segundo trimestre del año que ha publicado hoy el Banco de España, los activos financieros netos de las familias e instituciones sin ánimo de lucro (ISFLSH) representaron el 118,9 % del Producto Interior Bruto (PIB), 1,9 puntos porcentuales menos que lo registrado un año antes.