Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa han logrado describir cómo se relacionan la regulación genética y los mecanismos celulares que controlan la adquisición de la forma de un órgano gracias al estudio de la Drosophila melanogaster, la mosca del vinagre.
Los resultados se publican en la revista PLoS Genetics.