La selección española renació a base de orgullo, casta y trabajo para vencer a Canadá por 53-68 y clasificarse para semifinales del Mundial de baloncesto, que se está disputando en Tenerife, y luchar por las medallas.
El equipo español preparó lo cuartos de final con esmero. Su plan de partido fue como dijo a medias el seleccionador, Lucas Mondelo, en la previa cerrar en defensa para evitar los rebotes ofensivos de Canadá, una de sus principales fuentes de puntos; disminuir las pérdidas de balón y atacar la canasta contraria lo más directamente posible.