En 1989 José Luis Cuerda firmó una de sus obras más representativas, «Amanece que no es poco» y durante 30 años, los fans de este enorme director, productor y guionista de cine miraron una y otra vez hacia él clamando por una dosis más del mejor surrealismo patrio. Y ha llegado. Es «Tiempo después».
Pero responder al público que esperaba la secuela no era una de las preocupaciones de Cuerda, quien considera que si él «es capaz de escribir esto, el espectador es capaz de leerlo en igualdad de posibilidades».