Corea del Norte celebró hoy el 70 aniversario de su fundación con un desfile militar en el que no mostró misiles balísticos de gran alcance y del que no se hicieron eco medios estatales de cara a no deteriorar el actual diálogo sobre desarme con EEUU.
El líder norcoreano, Kim Jong-un, presidió el desfile pero no pronunció discurso alguno, tarea que recayó en el presidente honorífico del país, Kim Yong-nam, que no hizo aparente mención de las capacidades militares de Corea del Norte y puso énfasis en la importancia de impulsar el desarrollo económico.