Ana Julia está en prisión incondicional sin fianza con un auto durísimo el juez. Según el auto del magistrado, los micrófonos que la Guardia Civil colocó en el coche de Ana Julia captaron insultos de la asesina mientras metía el cuerpo sin vida del niño en el maletero del coche y trasladaba su cadáver. Además, resalta que Ana Julia planificó la muerte del pequeño Gabriel cavando un hoyo antes del asesinato.
Uno de esos sistemas de escuchas en el Nissan Pixo que habitualmente conducía la mujer y en el que se encontró el cadáver del pequeño permitió a los investigadores escuchar las “expresiones vejatorias” contra la víctima, mientras conducía, primero dando vueltas absurdas sin rumbo, y después dirigiéndose casi de forma automática al piso en la Puebla de Vícar que la criminal compartía con el padre del niño.
Esa revelación consta en el auto que ayer firmó el titular del juzgado número 5 de Almería, Rafael Soriano, y al que ha tenido acceso este diario. El magistrado da por buenos los episodios narrados durante el interrogatorio por la acusada, aunque no da credibilidad alguna a su tesis de que mató al pequeño, mediante asfixia con sus propias manos, en defensa propia porque el niño le amenazó con un hacha.