La canciller alemana, Angela Merkel, se comprometió hoy a imprimir ritmo a su gran coalición, tras los casi seis meses que se ha demorado la formación del nuevo Gobierno y tras reconocer que «ni Europa ni Alemania» pueden admitir más demoras.
«El tiempo apremia. Tanto en lo que concierne a dar un nuevo impulso a Europa como en nuestra política interna», afirmó en puertas de su cuarto mandato la canciller, antes de firmar el pacto de Gobierno entre su bloque conservador y el Partido Socialdemócrata (SPD).