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Primera línea de telegrafía óptica en España

  • Por José V. Ciordia, historiador

Tal día como hoy un 17 de febrero de 1799, el ingeniero militar español, Agustín de Betancourt y Molina, recibía la autorización del rey de España  Carlos IV, para instalar la telegrafía óptica en España.

Cuando en 1990, Mihail Gorbachov visitó por primera vez España, en el discurso oficial que realizó ante los altos cargos que le recibieron, dijo: “llego a un país del que tengo inmejorables referencias. Vengo a una España en la que nació el más ilustre colaborador que jamás ha tenido Rusia: Agustín de Betancourt…”

Las autoridades allí reunidas se miraron entre sí, preguntándose quién demonios sería aquel Agustín de Betancourt… al parecer, alguien recordaba que había una calle con ese nombre, pero ninguno sabía de quién estaba hablando el presidente soviético.

Gorbachov se quedó sorprendido… él, que llegaba desde un país que ha cultivado (en ocasiones en exceso) el culto a sus figuras patrías, pensaría que el bueno de Agustín de Betancourt sería un héroe en su España natal, sin saber que fue uno de los primeros en abandonar la piel de toro, comenzando eso que ahora llamamos “fuga de cerebros”.

Agustín nació en el Puerto de la Cruz, Tenerife en 1758. Y nació en una familia que ya indicaba lo que podía llegar a ser: Su padre, Agustín de Betancourt y Castro, sus hermanos José y María de Betancourt, ya tenían una buena posición en el mundo de la cultura y la ciencia de aquellos años. Incluso podemos citar que su hermana María redactó una “Memoria de sobre la forma de obtener el color carmesí” que podría significar la primera memoria científica realizada por una mujer en Canarias…

En 1778, Betancourt abandonaría las islas rumbo a Madrid para estudiar ingeniería y ya jamás volvería a pisar Canarias. Y fue allí, en la capital, donde en 1783 realizaba una hazaña histórica para nuestro país: La primera elevación de un globo aerostático en España, tan sólo unos meses después de que los hermanos Montgolfier realizaran su globo en Francia.

El insigne hecho se produjo ante toda la plana de la Familia Real en la Casa de Campo.

Durante esta época, su vida fue un continuo ir y venir de España a Francia, a Inglaterra dejando muestras de su genialidad por donde iba pasando: máquinas de vapor de doble efecto, nuevos modelos de telares, mejoras en la producción de muchas fábricas, minas…

Pero hablemos de lo que nos ocupa, la telegrafía óptica. Desde 1788 llevaba trabajando en el proyecto junto con el francés Breguet.

En 1799, una vez obtenida la autorización arriba descrita instalaba la primera línea telegráfica, desde Madrid a Aranjuez, con visos, además, de prolongarla hasta Cádiz. La línea estaba compuesta por cuatro puestos, Palacio del Buen Retiro, ermita delos ángeles (Getafe), Valdemoro y Monte Parnaso de Aranjuez, Lamentablemente hoy no queda nada de ello y solo nos quedan los testimonios históricos.

 

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