La selección española de balonmano certificó su clasificación para la segunda ronda del Europeo de Croacia, tras imponerse este lunes por 25-27 a Hungría en un durísimo encuentro, en el que los españoles se impusieron gracias a su mayor oficio.
Una veteranía que quedó especialmente reflejada en el manejo de las exclusiones, ya que mientras los españoles lograron abrir brecha en el marcador mediada la segunda mitad con un jugador sobre las pista, los húngaros no supieron nunca manejarse en inferioridad numérica.