Foto de familia con parte de la plantilla de Traperos de Emaús en la nueva planta
NAVARRAINFORMACION.ES
La presidenta del Parlamento de Navarra, Ainhoa Aznárez, ha visitado las instalaciones de Traperos de Emaús, tanto las actuales en Sarasa como el nuevo proyecto en Berriozar, donde ya se está trabajando en el nuevo centro de casi 20.000 metros cuadrados.
El Gobierno de Navarra ha declarado como inversión de interés foral el nuevo centro de la Fundación Traperos de Emaús en Berriozar para la ampliación de las actividades de gestión de residuos.
El colectivo solidario, con 45 años de historia, recupera más de 9.000 toneladas al año de elementos aparentemente ‘inútiles’ y los vuelve a poner en circulación
La Presidenta del Parlamento, Ainhoa Aznárez Igarza, ha visitado recientemente las instalaciones de Traperos de Emaús, tanto las actuales en Sarasa, como el nuevo proyecto en Berriozar, donde ya se está trabajando en el nuevo centro de preparación para la reutilización. Este espacio cuenta con cerca de 20.000 metros cuadrados, preparados para el tratamiento de las más de 9.000 toneladas de elementos en desuso que son recuperados y puestos en circulación.
El equipo de dirección con José Mari García Breso y Marta Lacueva Armendáriz, junto con la coordinadora de comunicación, Amaia Olaverri Malo, acompañaron a la Presidenta del Parlamento en su visita a los distintos espacios de recuperación que actualmente tiene Traperos de Emaús. Una organización con 45 años de historia que ha generado 230 puestos de trabajo regulados, con un crecimiento en 2014 de 185 personas, y este año hasta llegar a las 230 actuales, y que pretende en 2018 y con las nuevas instalaciones llegar a las 250 personas empleadas.
De toda esta plantilla, un 70% son personas con diferentes dificultades que acceden a un empleo estable y de calidad, con opciones solidarias desde el punto de vista laboral ya que pueden acceder a reducción de horas para repartir empleo, y con la equidad salarial como principio.
Durante la visita, García Breso explicó a la Presidenta del Parlamento que a lo largo de estos 45 años de vida el proyecto ha pasado de un local de 400 metros cuadrados al actual de 3.000 en Sarasa, y al nuevo de 19.000 en Berriozar. “La locura actual de consumo hace que haya más de 100 mil m3 de volumen de cosas”. Aznárez pudo conocer cómo en Sarasa entran más de 23 camiones diarios de voluminosos y ropa, “esto se ha quedado pequeño para todo lo que se consume, y muchas de las cosas están en perfecto estado, o con pequeñas reparaciones se quedan para su perfecto uso”, explicó García Breso.
La Presidenta del Parlamento, Ainhoa Aznárez Igarza, transmitió a los responsables de la entidad, el gran respaldo que desde todos los grupos se ha hecho a su proyecto, y el apoyo a un trabajo necesario, “la sostenibilidad del planeta, de nuestra economía, y desde luego de nuestra tierra pasa por una mayor concienciación en la necesidad de reducir el consumo, pero mientras vamos tomando conciencia de ello la labor de Traperos es imprescindible”, les transmitió.
La Fundación Traperos de Emaús realiza desde hace 40 años acciones de interés social (inserción de personas desfavorecidas) y de interés medioambiental (gestión de resíduos). En 2012 recogieron unas 8.500 toneladas de resíduos con un nivel de recuperación o reutilización del 85%. En la actualidad, realiza su actividad económica en el Centro de Recuperación y Reciclaje de Sarasa, en una nave de 3.000 metros cuadrados que limita el crecimiento y ampliación de actividades de gestión de resíduos, así como la creación de nuevos puestos de trabajo.
En las nuevas instalaciones ya se ha puesto en marcha el taller de auto-reparación arréglatelas, el área textil con el tratamiento de 1.200.000 kg al año, las salas didácticas y multimedia, y está previsto en breve poner en marcha el rastro. En una segunda fase se podrá en marcha el área RAES, mobiliario, ‘titos’, patio central y las oficinas. Una fase que se podrá ejecutar gracias al apoyo del Parlamento de Navarra a su proyecto vía presupuestos generales de Navarra.
La inversión permite el crecimiento futuro y la previsión de creación de empleo puede ser fácilmente incrementada debido a las posibilidades de ampliación de la actividad. Además, evitará que ésta se realice en otro lugar fuera de la Comunidad Foral.
