Inditex, dueño de enseñas como Zara o Massimo Dutti, logró un beneficio neto de 1.366 millones de euros en su primer semestre fiscal (febrero a julio), el 9% más que un año antes, mientras que sus ventas repuntaron el 11,5% y sumaron 11.671 millones, ha informado hoy el grupo.
En las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Inditex señala que sus resultados se vieron afectados por «la fuerte apreciación del euro» desde junio y por su decisión de hacer una transición rápida entre las temporadas de primavera/verano y otoño/invierno, «programando un fuerte lanzamiento de la campaña en agosto».
A tipo de cambio constante, el incremento de la facturación sería del 11%. Las ventas comparables (tiendas que llevan abiertas más de un año) crecieron el 6% y fueron positivas en todas las áreas geográficas en las que opera, según Inditex, que por primera vez detalla que estas ventas representan el 84% del total.
El resultado bruto operativo (ebitda) del mayor grupo de distribución textil del mundo fue de 2.292 millones de euros, el 9% más que un año antes, en tanto que el margen bruto se situó en el 56,4% de las ventas, frente al 56,8% del mismo periodo de 2016.
En un comunicado, el presidente de Inditex, Pablo Isla, ha destacado la «fortaleza y sostenibilidad» del modelo integrado de tiendas y online del grupo, y ha asegurado que sigue demostrando capacidad de crecimiento «con una apuesta decidida por la creación de valor social y medioambiental y una notable capacidad de generar empleo, especialmente en España».
Según datos de la compañía, que mantiene su previsión de invertir 1.500 millones durante el ejercicio de 2017, en los últimos doce meses ha generado más de 11.000 puestos de trabajo, 2.933 de ellos en España.
Como avance del tercer trimestre, la compañía ha detallado que las ventas en tienda y online a tipos de cambio constantes han aumentado el 12% del 1 de agosto hasta el 17 de septiembre. EFE
