Orlando Ortega, una de las esperanzas españolas de medalla en los Mundiales de Londres, y Ana Peleteiro se convirtieron este lunes en los primeros finalistas del equipo rojo, ambos con séptimos puestos que tuvieron sabor bien distinto para uno y otra.
«Estoy cabreado y molesto conmigo mismo. Esperaba mucho más de mí, aunque sabía que iba a ser difícil y que para estar en las medallas tenía que hacer la mejor carrera del año. Se vio bien claro que no tenía la condición y que faltaba mucho por hacer», dijo Ortega tras la prueba.