El potencial económico de Brasil, que está en proceso de salida de la recesión, es la principal fortaleza de este país como destino de las exportaciones internacionales, a pesar de las tensiones políticas y sociales causadas por la corrupción y la desigualdad.
El consumo y la inversión serán los motores de crecimiento que devolverán la economía a terreno positivo en 2017, ayudada también por la política de reducción de tipos de interés del Banco de Central de Brasil, según datos de la aseguradora de crédito Solunion a partir del informe de su accionista Euler Hermes.
Santander Brasil apunta que inestabilidad política no puede frenar acuerdos