La Audiencia Navarra ha condenado a un hombre a tres años de cárcel y a pagar una multa de 808 euros, por un delito contra la salud pública, tras sorprenderle en las inmediaciones de un bar en Pamplona con cocaína y éxtasis en dosis para su venta, así como con más droga en un registro en su casa.
La sentencia, dictada de conformidad y que aprecia la atenuante de drogadicción en el condenado, señala que los hechos tuvieron lugar en la zona de bares de la Plaza del Castillo de Pamplona, durante la madrugada de uno de los días de los Sanfermines del pasado año.
Los agentes observaron que al acusado, de 60 años, se le acercaban diversas personas que mantenían breves contactos con él, lo que les hizo sospechar que podía estar vendiendo drogas, por lo que fueron a intentarlo, momento en el que intentó deshacerse de una bolsita que contenía una pastilla.
Además, los agentes le requirieron que mostrara el dinero que llevaba y sacó de su pantalón 190 euros.
Por ello, le realizaron un cacheo exhaustivo y en su ano concentraron un rulo de papel higiénico que contenía cuatro bolsitas con 3,53 gramos de cocaína y 19 pastillas de éxtasis, droga que llevaba en su poder «para distribuirla entre terceras personas y el dinero incautado lo había obtenido con la venta» de estas sustancias.
También fue registrado su domicilio, en una localidad fuera de Pamplona, donde se hallaron 15.9 gramos de cannabis y cuatro bolsitas con 7,02 gramos de cocaína, así como material para distribuir en dosis y vender estas drogas. EFE