El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, intentó hoy cortejar al voto negro con una intervención ante una congregación cristiana afroamericana en Detroit (Michigan) en la que en tono humilde dijo que vino a «escuchar» y a «aprender».
Trump se presentó ante los feligreses del obispo Wayne Jackson, de la iglesia Great Faith Ministries International, para reconocer que «entiende» las quejas de los votantes afroamericanos sobre discriminación y falta de oportunidades.
El magnate convertido en político no se olvidó de mencionar la crisis de Detroit, una ciudad endeudada desde la quiebra de General Motors en 2009 y en capa caída desde que la industria automotriz estadounidenses comenzó a perder terreno junto con la manufactura en los 90.
Trump aseguró que «nuestro país está muy dividido» y «el sistema político nos ha fallado».
«Los que buscan la Presidencia no hacen lo suficiente para ir a las comunidades y aprender. Yo estoy aquí para aprender, de modo que podamos remediar la injusticia el cualquier forma y arreglemos la economía para que las comunidades afroamericanas se beneficien económicamente con empleo e ingresos», apuntó Trump.
Trump fue recibido a las afueras de la iglesia cristiana por varias decenas de manifestantes, entre ellos pastores afroamericanos, que tachan a Trump de racista. EFE/NAVARRA INFORMACIÓN