El Instituto de Investigación Biomédica (IRB) y el Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS) han creado una empresa biotecnológica para acelerar y abaratar el desarrollo de fármacos y moléculas con aplicaciones biotecnológicas basadas en la supercomputación.
FOTOTECA. CARMEN ABADLAB : KOTE
La nueva empresa se llama Nostrum BioDiscovery y usará las tecnologías bioinformáticas desarrolladas por los investigadores Modesto Orozco y Víctor Guallar.
Los dos investigadores, junto con los equipos del IRB y el BSC-CNS, buscarán “agilizar notablemente y aumentar la precisión de los estudios previos al lanzamiento de fármacos y productos biotecnológicos al mercado”.
“Este conjunto de tecnologías están orientadas al estudio de la predicción de qué fármacos interactúan mejor con las dianas terapéuticas, según las características genéticas de las mismas”, ha declarado a Efe el científico del BSC-CNS Víctor Guallar.
“Agilización y aumento de la precisión”
“Las ventajas de estas tecnologías son la agilización y el aumento de la precisión de los estudios previos al lanzamiento de fármacos y productos biotecnológicos”, ha añadido.
La creación de la empresa Nostrum BioDiscovery “podría suponer un ahorro equivalente a unos 40 millones de euros para cada nuevo fármaco, es decir, un 15-20 % menos del coste de la fase inicial, en la que se estima una inversión de hasta 300 millones de euros”, según Guallar.
“Ya no hay fármacos fáciles por descubrir, cada año se lanzan menos medicamentos al mercado y estos son extraordinariamente caros. La simulación computacional no puede hacer milagros, pero sí permite reducir significativamente el proceso de desarrollo del fármaco aumentando su poder terapéutico, lo que impacta positivamente en todo el proceso de desarrollo”, ha destacado Orozco.
La nueva empresa concentrará “tecnologías bioinformáticas de frontera” relacionadas con “el modelado de proteínas, el estudio de sus interacciones con moléculas de carácter terapéutico y la ingeniería de enzimas (moléculas de naturaleza proteica que catalizan reacciones químicas, siempre que sean termodinámicamente posibles) para la elaboración de productos biotecnológicos, todo ello a través de la supercomputación”.
Otras de las ventajas de la combinación de las tecnologías de Nostrum BioDiscovery serán la aceleración de hasta dos años en la fase inicial de desarrollo de los fármacos; es decir, la fase de descubrimiento previa a las pruebas de laboratorio. EFEfuturo
