Las nuevas impresoras 3D, con las que el grupo estadounidense HP pretende “reinventar el sector de la producción y manufactura de piezas”, saldrán al mercado a finales de este año.
La impresora estará basada en una ‘plataforma abierta’, que permitirá al usuario hacer uso del propio software de modelado de las piezas y tener libertad para modificar muchas de las funciones como forma, color o textura.
El nuevo sistema de tecnología que usarán las impresoras permite crear prototipos, proyectar y producir modelos diez veces más rápido y a mitad de precio respecto a otros sistemas actuales de impresión 3D, según HP.
La nueva tecnología se implementará en dos modelos de impresoras: la HP Jet Fusion 3D 3200, que saldrá a finales del 2016, y la HP Jet Fusion 3D 4200, que saldrá en algunos países europeos como España, Francia, Reino Unido e Italia a principios de 2017.
Costarán entre 120.000 y 150.000 euros y usarán una amplia gama de materiales y colores con los que los clientes podrán transformar los modelos a nivel de un ‘voxel’, la unidad de medida equivalente a un píxel en 3D.
HP espera que el mercado de la impresión 3D crezca entre 10.000 y 30.000 millones de dólares (entre 8.800 y 26.000 millones de euros) en el futuro, según estimó el presidente de la compañía para Europa, Medio Oriente y África, Nick Lazaridis, durante una presentación en el festival.
El lanzamiento de las nuevas impresoras es uno de los primeros pasos con los que la compañía quiere “liderar” el mercado de la impresión 3D.
