La computación cuántica será una realidad funcional en unos pocos años, según IBM, que acaba de crear una plataforma en la nube para que cualquiera pueda aprender y experimentar con un procesador cuántico
Los científicos empezaron a hablar hace tres décadas de computación cuántica, un entorno computacional completamente diferente que tendrá el potencial de resolver problemas intratables por los ordenadores actuales. Sin embargo, la ciencia se mueve en la teoría, aún no se ha logrado construir el ordenador cuántico (solo hay prototipos).
Pero IBM asegura que la computación cuántica “ha pasado de ciencia a convertirse en una área de ingeniería” y que ya se ha iniciado la senda que llevará, en pocos años, a la construcción de ese ordenador funcional basado en los principios de la mecánica cuántica.
“No va a ser dentro de cien años, va a llegar un día en el que vamos a tener un ordenador cuántico práctico que estará en la nube”, explica en una entrevista con Efe el vicepresidente de ciencia y soluciones de IBM Research, Darío Gil.
“La era de la computación cuántica ha empezado ya. Lo que se puede hacer ahora es pequeño y limitado, pero estamos en el camino de crear ordenadores cuánticos que se utilizarán para resolver problemas de la sociedad”, continúa.
IBM acaba de poner en marcha IBM Quantum Experience, una plataforma en la nube conectada a la web para que cualquiera que lo desee pueda experimentar con un procesador cuántico: aprender a programar, crear y probar algoritmos.
Del bit al qubit
La computación clásica está basada en bits (unidad mínima de información empleada en la informática): con ella se puede traspasar el mundo real a un mundo binario de ceros y unos -todo lo que hay detrás del ordenador que usamos todos se escribe en 0 y 1-.
Y la computación cuántica, que aplica los principios de la mecánica cuántica, está basada en qubits, que no sólo pueden ser ceros y unos, sino ser un 0 y un 1 a la vez, lo que da mayor velocidad de procesamiento.
Además, ésta trabaja en paralelo, de manera que puede resolver un número exponencial de tareas a la vez: un PC normal lo hace secuencialmente, primero resuelve un problema, luego otro y así sucesivamente.
“Eso conlleva que tenemos una representación de la información más sustanciosa, más grande” y determinados algoritmos y tipos de cálculos experimentarán una “aceleración exponencial”, destaca Gil.
En la Quantum Experience, cuyo acceso es gratuito, se pueden hacer simulaciones con un procesador de 5 qubits: “Cuando lleguemos a 50 qubits entraremos en un nuevo territorio. ¿Qué puede hacer un ordenador cuántico de 50 qubits? No lo podemos emular, no lo podemos simular, lo único que podemos hacer es construir uno”, asegura el experto.
El nivel de complejidad de esta computación es “muy elevado”, reconoce Gil, ya que el mundo cuántico “no es muy intuitivo” porque “pasan cosas extraordinarias” y además la información cuántica es “muy frágil”.
Es necesario aislar la información cuántica en un frigorífico a muy baja temperatura para preservar las propiedades de superposición y entrelazamiento. Un proceso “muy delicado”.
Pero Gil es muy optimista y no ve descabellado que el primer ordenador cuántico vea la luz en pocos años: : “Diría que dentro de los próximos cinco años con un nivel de confianza alta”.
Para el vicepresidente de IBM Research, la apertura de la Quantum Experience es un primer paso hacia ese hito. Son más de 10.000 las personas que se han sumado ya a la plataforma.
No llevaremos ordenadores cuánticos en los bolsillos, aclara Gil, pero sí nos beneficiaremos de su capacidad de cálculo a través de la nube.
El investigador vaticina que las primeras aplicaciones de la computación cuántica serán industriales: simulación y modelado de materiales y desarrollo de nuevos fármacos. La computación cuántica también será útil para la optimización de algoritmos y para el encriptado de información. EFEfuturo