La Policía ha detenido hoy a las cúpulas de Ausbanc y Manos Limpias, incluidos sus máximos responsables, Luis Pineda y Miguel Bernad, respectivamente, acusados de actuar de forma coordinada para extorsionar a bancos, una práctica que llegaron a utilizar en la acusación de la infanta Cristina en el caso Nóos.
En total son once los detenidos por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) en una operación en la que se han practicado seis registros en las sedes de la Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (Ausbanc) y Manos Limpias y en varios domicilios.
La detención ha sido practicada por agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada en el marco de la investigación de la supuestas prácticas que habría cometido esta organización y Ausbanc.
Fuentes de la investigación han informado a Efe de la detención de Miguel Bernard en esta operación en la que está previsto que se produzcan más arrestos y en la que se está realizando un registro en la sede de Manos Limpias en la calle Ferraz de Madrid.
Fuentes de la investigación han confirmado la información adelantada este jueves por ‘El Confidencial’ de que, entre estas actividades, el sindicato Manos Limpias exigió tres millones a dos entidades bancarias, entre ellas, La Caixa, para retirar la acusación contra la infanta Cristina, quien se sienta en el banquillo del ‘caso Noós’ precisamente por la acción de este sindicato.
Ausbanc (Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios) se presenta en Internet como una entidad española privada constituida en el año 1986 bajo el eslogan «lucha por tu dinero». Cuenta con más de 100 abogados repartidos en 30 oficinas ubicadas en distintas comunidades autónomas.
Por su parte, el sindicato Manos Limpias ejerce la acusación en multitud de casos, algunos de ellos tan trascendentes como el caso Nóos. Su participación permitió que la Infanta Cristina se sentase en el banquillo de los acuusados. EFE/Navarra Información
¿Instituciones, empresas y bancos accedían a pagarles un dinero si retiraban la querella? Esto suena a extorsionadores chantajeando a delicuentes, si no ¿por qué motivo iba a acceder un banco o institución a pagarles ese dinero, con toda la batería de abogados de la que disponen para defender su «inocencia»? ¿Se imaginan a un banco/empresa que no ha cometido ningún delito, pagando a unos chantajistas por una querella, sabiendo que esta no tiene ningún fundamento jurídico?
Esto huele bastante mal, Manos Limpias se había convertido en el azote de corruptos y mangantes, la oligarquía política ya estaba preparando una revisión de la acusación popular para librarse de ellos y ahora sorprendentemente nos dicen que se dedicaban a extorsionar. El sindicato se había granjeado enemigos muy poderosos, y se lo han quitado de en medio.