El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha lanzado hoy un mensaje de tranquilidad sobre Cataluña ante las dificultades de tesorería que tiene esa comunidad y ha señalado que la premisa del Gobierno es no dejar quebrar a ninguna administración pública.
Desde comienzos de la pasada legislatura el Ejecutivo de Mariano Rajoy ya dejó claro que «no iba a quebrar ninguna administración pública en España y, efectivamente, no ha quebrado ninguna», ha subrayado Montoro al ser preguntado por este asunto.
Montoro se ha expresado en estos términos en rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, unas horas antes de reunirse con el vicepresidente catalán y conseller de Economía de Cataluña, Oriol Junqueras, un encuentro que ha calificado de «normal», en el que analizarán la situación financiera de esa comunidad.
Según ha señalado el ministro, para evitar los impagos se pusieron en marcha instrumentos como el Fondo Autonómico de Liquidez (FLA), el pago a proveedores o los planes de reestructuración en ayuntamientos.
«No hay motivo para que se produzca ningún tipo de default», ha garantizado, si bien ha advertido de que eso no exime de seguir controlando el déficit para no sobrepasar los objetivos marcados.
«Aquí no quiebra nadie, pero hay que hacer los deberes de corrección de déficit, porque si no estaríamos financiando las alegrías de unos a costa de los esfuerzos de otros», ha apostillado.
No obstante, ha reconocido la preocupación del Gobierno ante la recomendación de la Comisión Europea sobre ese control del déficit de las comunidades y ha dicho que el Ejecutivo está preparando la respuesta, que se presentará cuando se tengan los datos definitivos.
En este sentido, también ha lanzado un aviso a partidos como PSOE o Podemos que aspiran a cambiar el Gobierno para poder cambiar las políticas y les ha indicado que no se pueden cambiar esas políticas porque se pondría en riesgo la recuperación económica y la creación de empleo.
«Quien crea que ahora puede aspirar a estar en el Gobierno sin continuar con esta política o se equivoca o está engañando a la sociedad española. Quien quiera subirse a la bicicleta y dejar de pedalear, va a hacer que la bicicleta se caiga, y el problema es que en ella va la sociedad española», ha ilustrado.
Así las cosas, ha subrayado que aunque a algunos «le gustaría» dar más capacidad con el déficit a las comunidades, «ahora no toca». EFE
La deuda española y la deuda catalana son dos productos perfectamente diferenciados para los inversores. Ese argumento de «hay que salvar la deuda catalana para que no caiga la española» es falso. Evidentemente, hay que apoyar a Cataluña como Autonomía perteneciente a España, pero dentro de las mismas reglas que aplican para las demás. Y que cada gobierno sea responsable de sus políticas financieras. La deuda es el consumo de recursos futuros. El problema es que el gobierno financia al separatismo con el argumento de no dejar caer a Cataluña.