Un nuevo de espacio de debate y encuentro en Navarra, “Diálogos en Pamplona”, inicia su andadura con el Venerable Maestro de la Logia Pro Libertate, Andoni Fuentes de Cía como primer invitado
Con el objeto de reflexionar en torno a los “Valores comunes y regeneración de la vida pública”, la iniciativa “Diálogos en Pamplona”, surgida de la sociedad civil de Navarra al margen de cualquier partido político, organización religiosa o grupo de presión, convocó a una veintena de comensales en un céntrico restaurante de Pamplona. Profesionales liberales, funcionarios, activistas en redes sociales…, todos ellos se reunieron, en su pluralidad, en torno a su primer invitado: Andoni Fuentes de Cía, Venerable Maestro de la Logia Pro Libertate, perteneciente a la Gran Logia de España; obediencia encuadrada en lo que históricamente se denomina “Masonería regular”.
El cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Consejo Pontificio para la Cultura, propuso en un reciente artículo (Il Sole 24 hore, 14/02/16), un diálogo con los que denominaba, de un modo que ha generado no poco debate en sectores católicos muy diversos, “Queridos Hermanos Masones”. Cuestión a debatir: los valores comunes, a su entender, “el sentido de comunidad, la beneficencia, la lucha contra el materialismo o la defensa de la dignidad humana”.
Para encuadrar justamente esta decisiva cuestión, Andoni Fuentes explicó a los comensales la historia de la Masonería, presencia en Navarra, prácticas habituales, sus polémicas relaciones con la Iglesia católica y su filosofía como escuela iniciática y de virtud.
Los asistentes, por su parte, plantearon diversas cuestiones al ponente: posición de la Masonería, como organización universal y fraterna, ante los nacionalismos; las previsiones disciplinares de una Iglesia católica que, sin embargo, no impiden un diálogo entre ambas instituciones; qué entiende por “valores comunes”; su relación con la tradición judeo-cristiana de la que surgen los derechos humanos y la democracia; su supuesta operatividad real en una sociedad fracturada y en crisis. Como no podía ser menos respecto a una institución tan desconocida como vilipendiada, también se planteó sus vínculos reales o no con los “centros reales” del poder mundial y el calendario acelerado de la mundialización globalista. Y todo ello desde un diálogo propositivo sustentado en la tolerancia, el conocimiento y el respeto.
En próximas convocatorias –los promotores disponen de un calendario prácticamente cerrado de actividades para los próximos meses al ritmo de un encuentro mensual- se tratarán diversos temas de interés: el futuro diseño geopolítico de Próximo Oriente y el destino de sus cristianos árabes y arameos; la emergencia educativa que sufre Navarra; la supuesta “agenda oculta” de Podemos; las perspectivas de recuperación del centro-derecha navarrista; chequeo de la sociedad civil navarra; etc.
Como símbolo de esta iniciativa se ha escogido una imagen de bellota y hojas del quercus. Como es conocido, en toda Europa este término -que designa tanto al roble, inseparable de Navarra, como a la encina, tan presente en España- es considerado desde la antigüedad como un árbol mágico que representa a la sabiduría. Así, la bellota, de cáscara dura, es contemplada como un fruto del conocimiento.
Así, este símbolo ilustra el espíritu de Diálogos en Pamplona, una iniciativa que surge del empuje de un grupo de antiguos animadores de la Fundación Leyre, que tan extensa labor sociocultural desarrolló en la década anterior, en su pretensión de convertirse, modestamente, en un espacio de encuentro y diálogo con el pensamiento y la cultura actuales; enmarcado en la corriente regeneradora de Navarra y el resto de España.
