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Bogotá reflexiona sobre el no-lugar gracias a la colección Thyssen-Bornemisza

Desde el cartel que recibe a los visitantes: «Not for you», la exposición «Atopía. Migración, legado y ausencia», de la colección Thyssen-Bornemisza inaugurada este martes en el Museo de Arte Moderno de Bogotá (Mambo), atormenta y hace reflexionar a los aficionados al arte sobre el «no-lugar».

«Atopía, que permanecerá abierta hasta el 5 de junio, describe diferentes territorios y mira al movimiento de las gentes y donde se sienten que pertenecen. Muy a menudo vienen de fuera de la ciudad», señaló a Efe la baronesa Francesca de Habsburgo-Lorena, dueña y directora de la Colección Thyssen-Bornemisza Art Contemporary (TBA21).

El concepto se entrelaza con las obras de los 19 artistas que reflexionan sobre ese peculiar concepto que escapa del “aquí” y busca adentrarse en el lugar de lo desconocido.

Entre ellos impactan al visitante las fotos de Sanja Ivekovic, que retrata su pasividad ante la visita de Josip Broz “Tito”, antiguo jefe de Estado de la extinguido Yugoslavia.

Al lado de esas fotos otros elementos más evocadores y conceptuales como las piezas de Jennifer Allora y Guillermo Calzadilla, “Surtidor de combustible petrificado” o “Autorretrato”, de Abraham Cruzvillegas.

En caso de que hagas una exposición en Suramérica, la baronesa de Habsburgo-Lorena ha señalado: “, no quieres aterrizar con ideas que no tocan a la gente y no afectan a las naciones alrededor”.

Para ella, existe “una fuerte dificultad con identidades, la colonización de Suramérica, cuestiones de diferentes generaciones, gente que viene a la ciudad”.

Es por eso que, en su parecer, “tenemos dificultades similares” por lo que “es muy relevante tener un punto para ambas culturas”.

Como percibimos el sitio donde vivimos, añadió: ” tiene mucho que observar con la imaginación y y como creamos nuestra propia imagen de eso”.

“Atopía. Se ha mostrado a ella migración, legado y ausencia de sitio “, que ya previamente en México, también dispone de espacios para otras modalidades artísticas como el dibujo, la escultura y las instalaciones.

Dos de ellas son las que despiden al visitante y más le impactan: “Frío estudio de la catástrofe”, de la dupla cubana Los Carpinteros, y “Staircase-V” del surcoreano Do-Ho Suh.

“Frío estudio de la catástrofe” muestra en la última planta del Mambo una pared golpeada del que se desprenden algunas de sus piezas, lo que también “menciona mucho acerca de la cultura en la que vivimos y cómo toleramos la violencia”, según la baronesa.

“Otros son más tradicionales: foto, pinturas, empleo en papel, pero mencionaría que el más atractivo y sorprendente . Van a ser probablemente estas grandes instalaciones que toman espacios completos del museo los más cautivadores”, informó la curadora Daniela Zyman.

Para ella, la Atopía “es un entendimiento de sitio que es tal vez menos ortodoxo en el sentido que comprendemos sitio: algo que podemos poner en el mapa”.

Según informó Zyman, al acercarse a este concepto saltaron de los sitios para impedir que “haya diferencia en el sentido de sur-norte, este-oeste”.

“No estamos tratando de crear jerarquía u orgullo nacional. Estos términos son relevantes pero queremos explorarlos de una manera diferente”, añadió.

Es allí que usan “un concepto muy poco utilizado en nuestra vida cultural de hoy” como Atopía, que reivindican los 19 artistas entre los que también enfatizan Allora & Calzadilla, Jonathas de Andrade, Taysir Batniji, John Bock, Monica Bonvicini, Mario García-Torres, Carl Michael von Hausswolff o Thomas Nordanstad.

“La Atopía no es tan fácil, es algo que es fluido, no es algo que puedas poner en distintos puntos del mapa. Es la nación del arte, en algunos de los momentos porque es un empleo que no se puede caracterizar más por sus fronteras y contornos”, terminó.

En total son 19 artistas con 23 piezas diferentes los que reflexionan sobre la “Atopía”, algo que “no es tan fácil” de definir porque es “algo fluido” y no lo puedes “poner en distintos puntos del mapa”, según Zyman.

Tras su estancia en Bogotá, la exposición seguirá su sendero y, probablemente esta va a ser en Brasil, si bien no está plenamente determinada su siguiente parada.

La exposición, que llega de México, estará en Bogotá hasta el 5 de junio antes de partir, probablemente a Brasil, si bien todavía no han cerrado su siguiente escala.

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