El presiente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha pedido al líder del PP, Mariano Rajoy, «valentía» para facilitar el acuerdo de gobierno entre PSOE y C’s, pero también piensa que no puede liderar esta nueva etapa política porque no cree en las reformas necesarias que necesita España.
Pero sí le ha pedido que abandone la «extraña pinza» que está haciendo con Podemos porque, de lo contrario, acabará votando también con los independentistas, ha advertido.
Rebatiendo al presidente en funciones, ha señalado que «no es creíble» que el acuerdo con el PSOE suponga una amenaza para la convivencia y la economía, como dice, y ha dicho estar convencido de que los votantes populares no están de acuerdo con que «todo siga igual».
Ha pedido al partido mayoritario que reflexione, limpie el partido, se regenere y permita que un partido conservador, uno de centro y otro de izquierda pongan las bases de una nueva etapa política, una etapa que recupere el espíritu de «diálogo» y «concordia» de la Transición, en el que todos demostraron estar «a la altura de las circunstancias».
Si bien ha reconocido a Rajoy que algunas cosas las ha hecho bien durante su mandato, los tiempos ahora son otros y le ha emplazado a que elija entre un Ejecutivo con Iglesias de vicepresidente y que tenga entre sus prioridades el referéndum de Cataluña u otro reformista con PSOE y C’s.
«¿Es que prefiere cuánto peor, mejor?. Yo prefiero cuanto mejor mejor», ha subrayado el presidente de Ciudadanos, cuyas palabras ha seguido en todo momento desde la tribuna de invitados su padre y su pareja.
Para Rivera, el pacto forjado con PSOE, al que ha agradecido su «coraje» a pesar de las dificultades, incluye más de 200 medidas que permiten mejorar la vida de los españoles, que son «los jefes», los que les pagan el sueldo, ha recalcado.
Y mientras hay dos fuerzas que «por lo menos» han sido capaces de dejar a un lado lo que les separa y poner en común lo que les une», a otros, como el PP, les da «pereza la investidura», o está Podemos, al que únicamente le interesa el «asalto al poder» y tener siete carteras ministeriales.
Rivera ha dado a entender que ambos sólo buscan ser «importantes» y no útiles, retomando las palabras del histórico líder británico Winston Churchill. Él -añade- lo que busca es ser «útil», aunque sea «un pichón o una naranja mecánica», como le han calificado desde un lado y otro.
Precisamente, es en este momento cuando lo más importante es ser de utilidad, y ahora hay un acuerdo «mejor» que el que no existía, pero faltan escaños para hacerlo realidad; por eso, ha vuelto a llamar al PP a que abandone la «trinchera ideológica» y se moje.
Nadie puede gobernar sin otro, ha recalcado, pidiendo una vez más «un poquito de humildad» al presidente en funciones, al que ha pedido que reconsidere el sentido de su voto además de reprocharle más de una vez que el PP no se ha querido reunir con C’s.
En Europa, ha señalado, hay 21 gobiernos en coalición, «no es tan raro», ha añadido.
Media hora larga de intervención en la que ha repasado algunas de las medidas incluidas en el pacto para luchar contra el paro y la precariedad, la emergencia social, mejorar la situación de los autónomos que ha asegurado conocer bien, por ser «hijo, nieto y sobrino» de autónomos, combatir el fracaso escolar, la violencia de género y cambiar a un modelo productivo basado en la innovación y la ciencia.
Y una cosa que sí ha dejado claro es que no «van a machacar» con más impuestos a los españoles y que pondrán en marcha un plan contra el fraude fiscal para que vuelvan a las arcas públicas los 2.800 millones de euros que «los Pujol» y otros evadieron «gracias a la amnistía fiscal del PP».
Acabar con los aforamientos, limitar el mandato del presidente del Gobierno a ocho años, primarias en los partidos y una ley electoral, «donde los votos valgan igual», son otras medidas previstas en el pacto, como la defensa de la unión de todos los españoles.
Esta última, en su opinión, es el escollo que impide a Podemos avalar el pacto porque sus confluencias no le permitirían.
Se ha permitido la licencia, como ha hecho antes también el portavoz de En Comú Podem, Xavier Domenech, de decir unas palabras en catalán apelando a la voluntad de todos los españoles para cambiar las cosas.
Y si casi ha empezado con Churchill, ha vuelto a recurrir a su referente político, Adolfo Suárez, para cerrar su intervención al utilizar otra famosa frase del artífice de la Transición: «La vida siempre te da dos opciones: la cómoda y la difícil. Cuando dudes elige siempre la difícil, porque así siempre estarás seguro de que no ha sido la comodidad la que ha elegido por ti».
Ciudadanos, ha afirmado, escogió «el camino difícil» de bajar a la arena, pero podía haber optado por quedarse en un rincón, «comiendo palomitas» y mirando como se peleaban «los rojos y los azules».
Es un pacto para el que Rivera le pide, ahora, colaboración al PP. Pero el pacto lo aniquiló Sánchez antes de negociar con Rivera, al negarse un sinnúmero de veces a las peticiones de diálogo del PP.