Cuando la abogada del Estado, que se supone defiende los intereses de todos los españoles, el primer día del juicio en el que figura como imputada la infanta Cristina, hermana del Rey Felipe VI, echó por la borda el significado de la frase, «Hacienda somos todos» , para justificar su defensa a ultranza de la Infanta en el ‘caso Nòos’, diciendo que era solo una frase publicitaria que no tenía mayor vigor, todos los ciudadanos de a pie dejaron de creer en el Estado de derecho.
Hoy, sin embargo, la justicia parece querer demostrar que hay que creer en el Estado, y que es igual para todos, aunque no lo sea Hacienda. A la luz de lo sucedido, de lo determinado por la judicatura, el sentar en el banquillo a una Infanta de forma permanente en el juicio, que comenzará el próximo mes de febrero por «cooperadora necesaria», es un aldabonazo a la justicia.
Nadie puede sentirse impune por lo que hace, ni poderoso. Debe saberse que «el que la hace la paga»