Marruecos, Túnez, Egipto, Jordania y Turquía confían en lograr este año la recuperación del sector turístico, que se ha visto afectado por la inestabilidad y la amenaza terrorista en estas regiones.
A causa de la sensación de inseguridad derivada de los atentados terroristas perpetrados en algunos de estos países, su demanda turística ha descendido y algunas compañías del sector que operaban en ellos han decidido abandonarlos.
De cara a 2016, todos ellos pondrán en marcha planes de comunicación para convencer a los turistas de la necesidad de vencer el miedo y «ver por ellos mismos» lo que estos países «pueden ofrecerles».
Para lograr esta recuperación de los visitantes, estos países apelan a la colaboración del sector privado después de que varias empresas hoteleras y navieras abandonaran los países que fueron víctimas del terrorismo yihadista.