El Rijksmuseum de Ámsterdam trata de adquirir dos retratos tempranos del maestro de la edad de oro de la pintura holandesa Rembrandt, una operación que de confirmarse se convertiría en la adquisición más costosa hecha por un museo en Holanda.
Una portavoz de la institución cultural confirmó a Efe el interés del Rijksmuseum en hacer esta adquisición, aunque declinó dar detalles sobre el proceso en el que se encuentra la operación.
Tampoco quiso concretar la cantidad que el museo podría pagar por ambos cuadros, que la cadena holandesa NOS cifró en 160 millones de euros, aunque sí confirmó que, de cerrarse, la adquisición se convertirá en la más cara efectuada por un museo o institución cultural del país.
Los lienzos están en la posesión de la familia francesa Rothschild, que los ha puesto a la venta, según NOS.
Las obras son dos retratos de cuerpo entero que representan a Maerten Soolmans y Oopje Coppit, en los que Rembrandt plasmó al detalle la indumentaria de la pareja y su elevado estatus social.
Las pinturas fueron ejecutadas en 1634, tras lo que posteriormente, en 1877, fueron vendidas por la familia holandesa Van Loon a los franceses Rothschild.
«El joven Rembrandt que ejecutó estos trabajos acababa de llegar desde Leiden a Ámsterdam para capturar a la elite en sus retratos», afirmó el director del Rijksmuseum, Wim Pijbes, en declaraciones a la radio BNR, recogidas por NOS.
Pijbes afirmó en esta radio que el museo está planeando hacer un «serio esfuerzo» para lograr las obras, para lo que está tratando de lograr financiación, según el diario digital Dutch News.
La portavoz del Rijksmuseum también declinó dar a Efe detalles sobre si el museo contará o no con el respaldo financiero del Ministerio de Cultura holandés, que a través de un portavoz ha negado su participación en la operación, según NOS.
Hasta ahora, la mayor cifra alcanzada en una operación de este tipo, según Dutch News, fue la compra del último cuadro conocido del artista holandés Piet Mondrian, Victory Boogie Woogie, por 37 millones de euros que realizó el Banco Central neerlandés en 1997 a través de una fundación.
Mondrian dejó inacabado este lienzo, que data de 1942-1944, antes de morir, una obra en la que reflejó su característico estilo abstracto y que ahora se encuentra expuesta en el museo Gemeente de La Haya.
El Banco Central Holandés adquirió este cuadro y la donó al Estado neerlandés para celebrar la transición de la moneda nacional, el florín, al euro, lo que causó polémica debido al alto precio pagado por el lienzo.
