Istvan Horvath, el amigo de Sergio Morate, el presunto asesino de las jóvenes de Cuenca, y su mujer, de origen venezolano, han asegurado, en declaraciones a Mediaset, que mientras estuvo en su casa el detenido les confesó que había matado a Marina Okarynska y Laura del Hoyo, pero que, en un principio, no le creyeron.
Este testimonio puede resultar muy importante para la investigación ya que ante el juez Sergio Morate se declaró no culpable. Sin embargo, su amigo Istvan, que le acogió en Rumanía, ha asegurado que Morate, mientras se encontraba en su casa, les dijo que cometió el crímen de las jóvenes.