El presidente de Venezuela dice que hay un eje «Bogotá-Madrid-Miami» contra su gobierno
La respuesta del presidente venezolano, Nicolás Maduro, a la decisión del expresidente español Felipe González de hacerse cargo de la defensa de los dos principales presos políticos del régimen chavista, adelantada por EL PAÍS, no se ha hecho esperar. Maduro ha calificado a Felipe González como “un lobbista” responsable de la dirección de lo que Maduro llamó “el eje Madrid-Bogotá”, que supuestamente conspira contra la revolución bolivariana. “González se ha incorporado abiertamente a apoyar el golpe contra Venezuela, el golpe contra mí”, ha afirmado.
Durante su programa semanal de radio y televisión, Maduro ha asegurado que el exdirigente socialista, a cambio de «un sueldo muy grande», se ha incorporado a una campaña contra Venezuela, que funciona en el «eje Bogotá-Madrid-Miami» y que tiene como objetivo perturbar la paz del país.
Según el mandatario, González está trabajando específicamente en acciones contra su gobierno que se desarrollan desde Colombia y España junto al publicista venezolano Juan José Rendón. «A Felipe González, como ustedes saben, le dieron la ciudadanía colombiana hace varios meses y los dos coordinan el lobby contra Venezuela para apoyar a los golpistas», ha señalado.
Las declaraciones de Maduro se producen pocas horas después de que se conociera que González defenderá a los líderes opositores venezolanos Leopoldo López y Antonio Ledezma, que están encarcelados y acusados de desestabilizar al gobierno y de pertencer a grupos radicales con planes violentos. La decisión del expresidente se debe a que considera que no se están respetando las garantías jurídicas de estos presos y que hay un continuo deterioro de los derechos humanos en Venezuela.
Una campaña de «guerra psicológica»
La supuesta campaña de «guerra psicológica», dirigida según Maduro por el publicista Rendón, tiene como objetivo «inventar cosas» sobre su país y busca una intervención extranjera en el país.
Maduro ha explicado que la semana pasada corrió el rumor de que su Gobierno estaba obligando a niños a escribir cartas dirigidas al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, para pedirle que derogue el decreto que aprobó recientemente en el que se declara a Venezuela una «amenaza». Asimismo ha denunciado una «segunda campaña» que consistió en la difusión del rumor sobre el secuestro y asesinato de niños en el país.
El presidente de Venezuela también ha acusado a militantes del partido opositor Primero Justicia, incluido el alcalde del municipio caraqueño de Sucre, Carlos Ocaríz, de estar en la organización de esta «campaña asquerosa».
«Es absolutamente falso, es absolutamente criminal (…), es la reacción de estos sectores imperiales para perturbar el ambiente interno para que el pueblo venezolano no salga a las calles a firmar, a movilizarse, a repudiar la agresión del imperio estadounidense contra nuestra patria», ha subrayado el gobernante.
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