La petición que hacen los partidos politicos, de mas recursos para la educación pública, como base para la igualdad de oportunidades y de una educación de calidad, la vemos habitualmente en periodos electorales. Es el recurso facil, pedir dinero como panacea para solucionar el problema.
Los partidos politicos deberian afrontar la realidad de la educación de una forma realista. Padres, alumnos y, sobre todo, profesores tienen mucho que decir. Son los grandes olvidados.
Son ya muchas las reformas habidas desde que este pais comenzó su andadura democrática y, ninguna ha solucionado los problemas de la educación. Se ha comprobado que por muchos recursos (llamemosle dinero) que se empleen, la educación española no goza de buena salud. Los datos a nivel internacional lo avalan.
Quizá una educación unitaria en todo el país, sin regionalismos absurdos; una potenciación de la figura del profesor; una mayor disciplina en las aulas y una mayor responsabilidad de los padres a la hora de educar a sus hijos, sin dejar toda esa labor a los colegios, son las claves del éxito educativo.
Se impone una reflexión real en la sociedad española acerca de esta cuestión, porque educar no es solamente gastar y gastar.