El CIS apunta a Podemos como el partido con mayor intención directa de voto, si ahora se hicieran unas elecciones generales, seguido por el PP y, en tercer lugar, por el PSOE dice una información publicada en el día de hoy. ¿Extraña?
A tenor de los acontecimientos que se van sucediendo en nuestro país día sí y día también, no parece raro que el común de los ciudadanos haya dejado de creer (si es que alguna vez había sido así) en los dos partidos que se repartían el pastel cada cuatro años y quiera dar carpetazo a ese bipartidismo inmóvil que nos ha llevado a una profunda crisis económica, a una gran depresión social y a ser el hazmerreír del Viejo Continente y el ejemplo de lo que no se debe hacer en medio de un escenario de corrupción en diferentes niveles.
Los últimos datos apuntan a que los dos grandes partidos van a dejar de ser las únicas referencias políticas en este país y que serán otros quienes lideren la intención de voto, al menos hasta mayo, entre los sufridos ciudadanos españoles. Un nuevo agente llega para quedarse en el escenario político, y parece que con una fuerza social detrás como respaldo más amplia que los hasta ahora inamovibles ‘cara y cruz’. El ya manido ‘A o B’, ‘cara o cruz’ dejará de tener sentido. Ahora serán tres en liza y, al menos sólo por el hecho de ser uno más en el escenario de la pelea, algo habrá cambiado en el panorama democrático nacional.
Ideologías, prejuicios, gustos, miedos, filias y fobias al margen, que tiempo habrá para ‘despellejar’ al recién llegado, lo cierto es que una variable más (con opciones reales) en el campo electoral debe considerarse como un paso más en el camino hacia la normalización democrática española. Seguramente, nuevas fórmulas y siglas que puedan ir creciendo y surgiendo en el futuro próximo a un lado y a otro del espectro político servirán también para asentar esa deseable normalidad que hasta ahora estaba embargada por el duopolio PP-PSOE.
Por eso, no es de extrañar que las encuestas muestren el hartazgo del ciudadano medio. El resultado de esa encuesta del CIS es un portazo en las narices al trabajo sucio del PP y del PSOE. Es una manera de decir que los españoles están gritando «¡Basta!» a esa incapacidad de gobernar, a esa ineptitud, a ese modelo político que no funciona, a ese conformismo, a ese frotarse las manos cuando bajan las cifras del paro en 100.000 personas mientras otras 500.000 abandonan España por falta de presente y de futuro.
Las encuestas indican el sentir de la sociedad y actualmente la sociedad habla claro. Bienvenidas éstas y otras ofertas también. Desde la izquierda y desde la derecha, la sociedad está cansada de promesas incumplidas, de corrupción, de crisis, de paro, de ladrones y de mentirosos. La sociedad española opina.
Redacción Navarra Información.
