

El Ministerio del Interior ha acordado enviar a Melilla una unidad de intervención rápida de la Guardia Civil -los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS)-, dotación similar a los antidisturbios de la Policía Nacional.
Esta decisión se ha tomado después de que más de 200 inmigrantes naturales de Camerún y Guinea, en su mayor parte, saltaran este viernes la valla de Melilla y se han adentraran en esta ciudad.
Fuentes de Interior explicaron que la unidad de GRS que se envía para reforzar la seguridad del perímetro fronterizo melillense se suma a los agentes que se habían enviado últimamente a este punto para mejorar su protección.
Los 200 subsaharianos que esta han mañana han saltado la valla de Melilla llevaron a cabo esta acción hacia las siete de la mañana de este viernes en la zona próxima a Beni Enzar. Se trata del segundo salto que se registra esta semana y el más numeroso desde el año 2005.
Los inmigrantes portaban todo tipo de objetos, como piedras, palos y botellas, para enfrentarse a los agentes de la Guardia Civil. No obstante, los miembros de la Benemérita no hicieron uso de pelotas de goma para repeler el salto, tras la prohibición dada por la dirección de este cuerpo de seguridad.
Este refuerzo de la seguridad en la zona se suma al que el Departamento de Jorge Fernández Díaz acordó después de la tragedia de Ceuta, que el pasado día 6 costó la vida a quince inmigrantes que intentaban alcanzar a nado la playa de El Tarajal.
El Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) del Instituto Armado es algo así como la Unidad Militar de Emergencias para el Ejército español, una unidad de elite conformada por más de 1.600 agentes antidisturbios que son, para Interior, todo «un referente internacional» con más de 25 años a sus espaldas.