Según esta Institución la bajada de las temperaturas, el encarecimiento de los precios de la energía, la antigüedad del parque de viviendas y la reducción de los ingresos, ayudas y subsidios, agravan alarmantemente la denominada ‘pobreza energética’
Esta pobreza es la incapacidad de un hogar de satisfacer una cantidad mínima de servicios de la energía para sus necesidades básicas.
Para hacer frente a esta situación y al impacto de la crisis económica en los colectivos más vulnerables, Cruz Roja cuenta con el programa de ayuda, ‘Ahora + que nunca’, dirigido a incrementar la atención a las personas que se encuentran en situación de extrema vulnerabilidad.
En el actual contexto de crisis socioeconómica, las personas mayores constituyen uno de los colectivos más vulnerables. Y la pobreza energética les afecta especialmente: más del 54 por ciento de ellos no puede mantener su casa en condiciones adecuadas de temperatura durante el invierno. De hecho, un 33 por ciento de las personas mayores atendidas por Cruz Roja no puede poner la calefacción en invierno. Los ingresos no alcanzan. Un 12,7% de estas personas dice que no llega a fin de mes y cerca del 33% ha tenido que ayudar por primera vez en 2013 a hijos y nietos por motivos económicos, porcentajes muy significativos ya que hay que subrayar que más de la mitad de los mayores atendidos por Cruz Roja vive por debajo del umbral de la pobreza.